Ein Karem es un sitio muy cercano
a Jerusalén, son solo siete u ocho quilómetros hacia el oest. Es una zona de
montes no demasiado altos y de un suelo vegetal rico en vegetación.
En Ein Karen resaltan dos iglesias que recuerdan estos hechos, la iglesia de la visitación y la iglesia de San Juan Bautista. Caminando un pequeño trayecto entre ambas se encuentra la fuente de María. Es un panorama muy bonito de calles con mucha pendiente y vegetación entre los cerros.
Según la tradición allí vivieron Zacarías e
Isabel, esta última parienta de la virgen María. Zacarías sacerdote del templo
de Jerusalén.
Según el evangelio de Lucas, por un
milagro, ya mayores concibieron un hijo. Allí nació Juan el Bautista. Lucas en su evangelio hace un
largo paralelismo entre el nacimiento del Bautista y el de Jesús.
María apenas producida la encarnación
recibe por parte del ángel Gabriel la noticia de que Isabel se encuentra en su
sexto mes de embarazo.
Dice Lucas que María “fue con prontitud a
la región montañosa, a una ciudad de Judá” Lc 1,39. Es el punto más destacado
de su misión, partió a ayudar a su prima y también a dar a conocer a Jesús
desde su vientre. Y no esperó, dejando de lado su situación personal, partió
con prontitud.
María estaba en Nazaret donde vivía cuando
recibió el anuncio del ángel. Debía recorrer alrededor de ciento cincuenta
quilómetros y tenía tres rutas posibles, la del oeste a lo largo de la costa
del mediterráneo, la central a través de las montañas y la que sigue el curso
del Jordán. La primera ruta no era usual para los judíos
que viven el interior de su territorio y no acceden al mar. Por ahí pasan las famosas calzadas romanas. La ruta central es la más difícil. Sin duda María se unió a alguna de las caravanas que pasen por las cercanías, esta era la única forma de viajar seguro en ese momento.
Los hebreos que surgieron de tribus nómadas
del interior de Asia menor, Canaán, Palestina, Arabia, Egipto no vieron el
mediterráneo como una oportunidad, la falta de árboles importantes, el nomadismo,
la falta de islas próximas los alejó de él y hasta los hizo pensar en un lugar
donde habitan los demonios. Los límites de la tierra prometida terminan en el
mar grande (Mediterráneo)
En el patio exterior de la iglesia de la
Visitación se encuentra escrito el Magnificat en varios idiomas, mientras que
en la San juan Bautista es el canto de Zacarías.
El evangelista Mateo, con una redacción más
hebrea que Lucas que escribía y pensaba en griego, redactó los acontecimientos
posteriores al nacimiento de Jesús bajo la forma de un relato, nos dice que
Herodes se enfureció terriblemente cuando los magos volvieron a oriente sin
indicarle el sitio del nacimiento del rey de los judíos y envió a matar a todos
los niños de Belén y de toda su comarca, de dos años para abajo. Mt 2, 16. En
el evangelio se menciona que la sagrada familia huyó hacia Egipto alertada por
el ángel. No menciona Mateo lo acontecido con Juan, que teniendo alrededor de
seis meses vivía con sus padres en esta ciudad cerca de Belén.
El protoevangelio apócrifo de Santiago 22,2-3
narra de forma diferente lo acontecido con Jesús, indicando que María lo depositó
en un pesebre de bueyes. Respecto de Juan lo resuelve de una manera mágica,
diciendo de Isabel y el niño que la montaña se abrió y los recibió y en la iglesia de la visitación se recuerda con
una roca el sitio en el que se escondió Juan.
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